Desde que a Elena Huelva le detectaron el Sarcoma de Ewing, un tipo de cáncer que afecta a los huesos, quiso hacer visible la enfermedad en sus redes sociales. Unos años después y tras luchar como nadie por la vida, la influencer ha fallecido a los 20 años.
Su familia lo anunció ayer por la tarde a través de una historia en su cuenta de Instagram: «Desde esta mañana, Elena osbaila y osmira desde su estrella». Esta frase iba seguida de la que siempre decía la joven y con la que quiso que la recordaran, #misganasganan. Porque dejó grabado que «no hace falta ganar para saber que ya hemos ganado. La vida se trata de vivir y de llevarte los recuerdos buenos de las personas».
Elena Huelva venía avisando desde hacía unos días que las cosas no estaban funcionando de la mejor forma. El 4 de diciembre le encontraron más enfermedad en la traquea y con un vídeo, en el que parecía que se despedía de todos, advirtió «que las cosas no están yendo bien» y que ella ya había ganado en la vida. Aun así, luchó durante un mes más esperando que el 2023 le sorprendiera.
Elena desprendía alegría e ilusión. Brillaba con luz propia. Era una apasionada de la vida y así lo demostró día tras día en su cuenta de Instagram. De tal forma que llegó a formar parte de las familias de muchas personas, entre ellas laperiodista Sara Carbonero, quien se considera su amiga y quien le ha escrito una despedida muy emotiva.
Sara Carbonero daba a entender en su texto que Elena ya había ido despidiéndose de todos los que estaban a su alrededor. Sabía que en cualquier momento podía irse y decidió despedirse de la gente a la que quería con palabras bonitas.
Ahora, Elena Huelva deja un legado que jamás se olvidará, una sonrisa que siempre quedará entre los que la conocieron personalmente y por las redes sociales, y unas ganas de vivir que enseñan a valorar lo que tenemos. Vuela alto, Elena.