Tony Glover, quien se desempeñaba como vicepresidente de música comercial en Sony Music Australia, fue despedido el jueves pasado (8 de abril) luego de una investigación sobre malos tratos al personal. Su despido se produjo durante un juicio más amplio contra el comportamiento inapropiado en la industria de la música, en el que múltiples artistas y empleados de algunas discográficas más grandes del país, también fueron acusados.
Glover comenzó su carrera en una tienda de discos antes de unirse a BMG Music, que luego se fusionó con Sony en 2004. Desde su contratación en febrero de 1991, ha ocupado varios puestos en la compañía, hasta llegar a ser vicepresidente de la división de música comercial, bajo la supervisión directa del CEO de Sony, Denis Handlin.
La historia fue revelada durante el fin de semana por el Sydney Morning Herald. Según el artículo, la investigación se inició en febrero después de que un miembro del personal presentara una denuncia inicial. Se dice que varios empleados acusaron a Glover de bullying y acoso.
Las acusaciones de acoso se producen cuando un movimiento inspirado en #MeToo comienza a influir dentro de la industria musical de Australia en los últimos meses, aunque este tipo de casos se hayan visto en la industria desde mucho tiempo atrás y no solo en esta productora musical.
“Al recibir las quejas de presunta conducta inapropiada, se contrató de inmediato a un especialista para investigar de forma independiente las acusaciones”, dijo un portavoz de Sony Music Australia al SMH.
“Una vez finalizada la investigación, la empresa actuó de acuerdo con los hallazgos. Sony Music Australia puede confirmar que Tony Glover ha sido despedido con efecto inmediato”.
Glover niega las acusaciones y le dijo al periódico: «Ahí estoy yo y están los denunciantes y supongo que la cantidad de denunciantes superó mi palabra». Continuó: “Nunca antes me habían sancionado, (la investigación) fue una completa sorpresa. Creo que soy una persona decente, una persona leal».